Para la mayoría fue diversión y descanso, pero para 81 familias la Semana Santa fue de dolor y tragedia. Desde el 23 hasta el 31 de marzo, una serie de eventos desafortunados cobraron la vida de 81 personas, dejando a familias enteras en duelo en el país, según estadísticas de Radio La Primerísima. Las causas de estas muertes incluyen accidentes de tránsito, con 30 fallecidos; 27 ahogados, 13 fallecidos por homicidios, y 11 en otros incidentes, incluyendo caídas, ataques de abejas africanizadas y suicidios.
► El sábado 23 de marzo, la jornada comenzó con un sombrío presagio. Accidentes de tránsito, actos de violencia y encuentros fatales con abejas africanizadas dejaron un saldo de no menos de 10 personas fallecidas en circunstancias lamentables, marcando el inicio de una semana fatídica. A medida que avanzaba la semana, la tragedia parecía no dar tregua.
► El domingo 24 de marzo, seis vidas se apagaron en incidentes que oscilaban desde choques vehiculares hasta ahogamientos.
► El lunes 25 de marzo, la cifra de fallecimientos ascendió a ocho, debido a accidentes de tránsito, ahogamientos y tragedias laborales.
► El martes 26 de marzo, ocurrieron dos femicidios en Boaco y Matagalpa. Las víctimas fueron Yaribel Hernández González, de 22 años, y Jenny Isabel Robles Rodríguez, de 40 años.
► El miércoles 27 de marzo, cuatro vidas se perdieron en incendios y colisiones automovilísticas-
► El jueves 28 de marzo vio un aumento en los ahogamientos y la violencia, con seis muertes reportadas en todo el país.
► El viernes 29 de marzo resultó ser el día más trágico de la semana, con un total de 23 fallecimientos.
► El sábado 30 y domingo 31 de marzo no ofrecieron respiro, con un total de 19 muertes.
De los 27 fallecidos por ahogamiento, 20 fueron hombres y 7 fueron mujeres. En cuanto a la distribución por grupos de edad, hubo 4 menores de 18 años, 10 entre 18 y 40 años, 5 entre 41 y 65 años, y 1 mayor de 65 años. En el caso de las mujeres, hubo una menor de 18 años, 3 entre 18 y 40 años, 2 entre 41 y 65 años.
Información La Primerísima